Desde la consideración de que la cooperación internacional tiene como finalidad el colaborar con proyectos mutuamente concertados, en el cumplimiento de los objetivos de desarrollo concretos y específicos del país receptor, en la fundamentación del Proyecto OULAD MOUSSA, igual que en la de su predecesor, hemos emprendido una serie de acciones interrelacionadas, dirigidas a conseguir mejorar una situación que no sólo abarca lo estrictamente escolar, sino que también engloba todos los ámbitos que de la educación se derivan.
La identificación de la problemática existente en las regiones rurales de Marruecos, en relación con la carencia de recursos educativos, es fruto de un trabajo conjunto efectuado el año 2009, destinado a valorar las condiciones socioeducativa y los principales déficits de diferentes comunidades del país. Una vez consensuadas las necesidades escolares básicas, se procedió a redactar el Programa TICED-MARROC, con el objetivo de favorecer el acceso y la utilización de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones en entornos desfavorecidos del Magreb.
DOUAR OULAD MOUSSA
El Sector Escolar Oulad Moussa forma parte de un conjunto de escuelas ubicadas en la región Tansift-Elhouaz, de la provincia de Rhamna. Esta zona está situada muy cerca de la Comunidad Rural de Oulad Imloul.
El Douar Oulad Moussa se ubica 5 km al este de la carretera principal nº 9 que une Marrakech con Casablanca. Cuenta con una población estimada 3.000 habitantes pobres y sin cultura, afectados por el paro, la subocupación y la precariedad laboral, y las dificultades de acceso a los servicios básicos, lo cual condiciona cualquier mejora en su situación. La población parece exiliada en otra dimensión del mundo.
A pesar de que la zona se encuentra bien comunicada por carretera, la población mantiene un cierto aislamiento con el mundo más desarrollado, dedicándose al pastoreo y a una agricultura muy primitiva.
Las familias viven de manera austera, a veces prescindiendo del agua y de la luz. El prestigio y el rango social está marcado por la cantidad de tierras y cabezas de ganado que poseen. Disponen de muchas ovejas y cabras, pero se muestran reticentes a venderlas por miedo a perder su estatus.
Esta realidad y manera de entender la vida trasciende sin oposición de padres a hijos, haciendo muy difícil para el profesorado impulsar un cambio de mentalidad en los padres, que necesitan de los hijos para los trabajos domésticos o del campo, negándoles el privilegio y su derecho legítimo a la educación.
De hecho, sólo una cuarta parte de los escolares de la región continúan sus estudios en Oulad Imlou o Marrakech cuando cumplen 12 años y el índice de absentismo escolar es muy alto.
La escuela satélite de Oulad Moussa recibe cada año 170 alumnos entre 6 y 14 años, de los cuales el 35% aproximadamente, son chicas.
Como explica Mme. Laila, una de las profesoras de la escuela y presidenta de la Association NADA:
“…su contribución a nuestra organización apoyará nuestros esfuerzos para poder trabajar con el objetivo de ayudar a los niños de las zonas rurales, a tener una educación y un mejor futuro. Gracias por su respuesta y por el interés en llevar a cabo nuestro proyecto”.